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domingo, 26 de agosto de 2012

Dos valores de Reino.

EL VALOR DE BURGER KING

Come como rey es el slogan de Burger King. La intención es que te sientas como rey, te dan hasta una corana hecha de cartón, y puedes añadir o quitar cualquier ingrediente del menú, porque tú eres el rey. Simón, el fariseo, invita a Jesús a comer a su casa. Pero no lo trata con hospitalidad, no le da agua para lavar sus pies, no lo saluda, no lo unge con aceite. En nuestros tiempos sería como no decir ¿cómo has estado? Bienvenido, ¿quieres un vaso de agua o de refresco? Si gustas refrescarte por allá puedes lavarte las manos, préstame tu chamarra te la pongo aquí para que no se maltrate ¿Qué quiere comer, tengo de esto, esto otro o aquello? ¿Quieres tortillas o pan? ¿Estás cómodo? ¿Necesitas algo más?

El pastor Max Lucado dice: “Hasta Drácula hubiera tenido mejores modales que Simón”. En cambio, la mujer pecadora trató como rey a Jesús. No todos están dispuestos a tratar a los demás como rey, seamos valientes y hagamos lo que sea necesario para adquirir el valor.

EL VALOR DE VER LO MEJOR

Estamos muy acostumbrados a ver lo peor de las personas, y a veces hasta de nosotros mismos. Somos expertos en detectar defectos, ver lo malo, señalar cuando alguien se equivoca. Todos los que estaban en la comida en casa de Simón fariseo, observaron llegar a esta mujer pecadora, la realidad no se sabe porque se le llama de esa forma, pero la mayoría coincide en que era una prostituta. ¿Pueden ver la escena? Los ojos fijos en la mini falda, el maquillaje excesivo, el pelo alborotado, el olor del perfume barato llenaba la habitación, parece que se hubiera bañado con el. El escote no dejaba mucho a la imaginación. Acostumbrados a ver los defectos, encuentran el adjetivo perfecto, ¡pecadora!

No así Jesús, él no acostumbra a ver lo malo, es especialista en ver lo bueno, él no ve el exceso de maquillaje, él ve que está corrido por haber llorado, Jesús no ve una ofensa que su comida sea interrumpida, ve la necesidad de una mujer. Jesús ve lágrimas que lavan, cabello que sirve de toalla, labial pintado en sus pies por tanto beso, y del perfume del cual tanto se quejaban, ahora ha quedado impregnado en los pies del maestro.
No todos están dispuestos a ver con los ojos de Jesús, seamos valientes y hagamos lo que sea necesario para adquirir el valor.

Alejandro Cunillé Fuentes

viernes, 29 de junio de 2012


Y luego el Espíritu le impulsó al desierto. Y estuvo allí en el desierto cuarenta días, y era tentado por Satanás, y estaba con las fieras; y los ángeles le servían.


Marcos 1:12-13




Confiemos - “Y luego el Espíritu le impulsó al desierto.”

Los que somos Hijos de Dios, somos impulsados por su Espíritu. Somos como una barca sin remos en alta mar, impulsados únicamente por el viento. Nuestro destino es seguro, nada podemos hacer para cambiar el rumbo, Jesús murió por nosotros. “Todo lo que el Padre me da, vendrá a mí; y al que a mí viene, no le echo fuera” “Y esta es la voluntad del Padre, el que me envió: Que de todo lo que me diere, no pierda yo nada, sino que lo resucite en el día postrero” Gracias a Dios por esta bendición, no existe nada que pueda hacer para salirme del camino.


La prueba – “Y estuvo allí en el desierto cuarenta días,”

No nos engañemos, el camino no será fácil. Tendremos periodos de pruebas. Nos sentiremos solos, aunque no sea así. Sentiremos estar en un desierto sin agua abandonados, sin nadie alrededor para que nos ayude. No será fácil y será cansado. Pero debemos seguir tenemos nuestro destino asegurado porque Jesús dice: “Que de todo lo que me diere, no pierda yo nada, sino que lo resucite en el día postrero”


La tentación - “, y era tentado por Satanás, y estaba con las fieras”

Nuestra barca será impulsada a diferentes tentaciones, nosotros no tenemos el control pues es el viento (Espíritu) el que nos impulsa. Así que la tentación no es en sí mala. Al contrario es una muestra de que realmente somos hijos de Dios y vamos por el buen camino. Cuando no éramos guiados por el viento y teníamos control de nuestro viaje, no existía tal tentación hacíamos lo que queríamos. Pero ahora somos impulsados al desierto no porque lo deseemos; ¿por qué quién quiere ser tentado? Pero si vamos contentos porque pronto veremos como ese viento que nos impulso al desierto, nos impulsará muy lejos, con mucha más fortaleza y confianza. Porque “fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar.” Acercándonos más y más a nuestro destino.


No estas sólo – “y los ángeles le servían”

“Y oró Eliseo, y dijo: Te ruego, oh Jehová, que abras sus ojos para que vea. Entonces Jehová abrió los ojos del criado, y miró; y he aquí que el monte estaba lleno de gente de a caballo, y de carros de fuego alrededor de Eliseo.”


Somos más ciegos de lo que creemos. Algunos dicen que pueden ver. Yo digo gracias Señor por estar ciego, porque de esta manera me dejo guiar por tu Espíritu. Porque es verdad, el que tiene vista no necesita ser guiado. Pero nosotros los ciegos necesitamos de tu guía. Necesitamos de tu impulso.

No existe, nada en este mundo que se oponga contra la voluntad de Dios. No hay sabiduría, no inteligencia, ni nada que puede ir en contra del plan de Dios. Cuando Dios quiera simplemente se hará, nadie se opondrá porque el es Todopoderoso.  “Y luego el Espíritu le impulsó al desierto.”

Le pediré a Dios que sean impulsados por Él. Que los guié al destino de la salvación.



Dios te bendiga, quedo a sus órdenes.
Alejandro Cunillé Fuentes
choco_2001@hotmail.com
https://www.facebook.com/alejandro.cunille

No te pierdas el gran congreso de adurtos en nuestra iglesia Asamblea de Dios Betel La Zanja. te imvitamos a que venga a disfrutar d ela presencia del Señor.


Dios tiene cosas grande para ti.


miércoles, 27 de junio de 2012

Aprovecha bien el tiempo


El tiempo es un regalo de Dios. No se puede alterar la cantidad que El nos da. Las demandas sobre nuestro tiempo son menos o más según la etapa de nuestra vida. Cómo proporcionar las 24 horas de cada día es lo que a nosotros nos interesa.
Jesús dijo, “Me es necesario hacer las obras del que me envió, entre tanto que el día dura; la noche viene, cuando nadie puede trabajar” (Juan 9:4). Jesús aquí nos da dos principios de cómo usar el tiempo.
Primero, conoce lo que debes hacer. Como hijos de Dios, lo que nos corresponde a nosotros queda claro: fue dado a nosotros el ministerio de la reconciliación (2 Corintios 5:18). Son diferentes nuestros dones y cargos, pero al fondo la tarea es la misma.
El mundo de hoy ofrece un sin fin de opciones. Vivimos en tiempos engañosos. Las cosas que parecen ser buenas no siempre son las mejores. Oremos por discernimiento. Invirtamos nuestro tiempo y vigor en lo que de veras cuenta para la eternidad.
Segundo, haz los trabajos cuando necesitan ser hechos. No hay que trasmañanar. Yo me hallo en situaciones frustrantes cuando hago esto. Me pone a mí y a otros bajo presiones innecesarios. El peligro entonces es de no tener tiempo para las cosas más importantes.
Tuve una vecina anciana que estaba muriendo del cáncer. Yo, por el hecho de diferir visitarla, casi perdí la oportunidad de orar con ella. Gracias a Dios, El siguió trayendo a mi memoria esta necesidad hasta que la visité. Ella encontró la paz con Dios una semana antes que murió. ¿Cuántas oportunidades más he perdido por no trabajar entre tanto que el día dura?

¿Qué responderías tú?


Una pequeña historia que encontré navengando por ahí y quiero compartirla con Uds. y para su reflexión.
Esta es una prueba que todos nosotros esperaríamos pasar, pero ninguno de
nosotros realmente quiere tomar. Un pistolero enmascarado apunta su arma a un cristiano y pregunta “Usted cree en Dios?? Ella sabe que si dice “sí,”
pagará con su vida. Pero su fidelidad a su Señor es mayor.
Así, con lo que serían sus últimas palabras, ella serenamente contesta “sí,
yo creo en Dios.”
Lo que hace esta historia notable es que el pistolero no era ningún
matón a sueldo. El evento que yo soy describiendo tuvo lugar martes pasado en Littleton, Colorado.
Como el Washington Post informó, los dos estudiantes que dispararon a 15
personas, Eric Harris y Dylan Klebold, no escogieron a sus víctimas al azar–ellos estaban guiados por un caleidoscopio de feos prejuicios.
La mayoría de los medios de comunicación ha enfocado su atención al hecho
de que los asesinos manifestaban una hostilidad hacia las minorías raciales y hacia los atletas de la escuela, pero había otro grupo hacia el que tenían
odio: a los cristianos. En la escuela secundaria de Columbia había gran cantidad de ellos. De acuerdo al recuento de las víctimas, fueron asesinados ocho cristianos–cuatro evangélicos y cuatro católicos.
Entre las víctimas estaba Cassie Bernall. Cassie tomó la decisión dramática
de ser fiel a su fe hasta el fin..
Cassie era una joven de 17 años con cabello rubio largo, cabello que ella
quiso cortar para hacer pelucas para pacientes de cáncer que habían
perdido su pelo a través de la quimioterapia. Ella era una creyente activa en su grupo de jóvenes en la Iglesia de la Comunidad de Westpool y era conocida por llevar su Biblia a la escuela.
Cassie estaba en la biblioteca escolar leyendo su Biblia cuando los dos
jóvenes asesinos entraron en ella. Según dieron testimonio algunas
personas, uno de los asesinos apuntó su arma a Cassie y preguntó, ¿crees
tu en Dios”? Cassie hizo una pausa y entonces contestó, “Sí, yo creo en Dios”,
“¿Por qué?” replicó el pistolero. Cassie no tubo oportunidad para responder
la segunda pregunta; el pistolero ya había disparado a su víctima.
Como su compañero de clase Mickie Caín le dijo a Larry King de CNN, “Ella
simbolizaba completamente a Dios. Cuando los asesinos preguntaron si
alguien en ese lugar tenía fe en Cristo, ella habló y ellos le dispararon.”
El martirio de Cassie es aún más notable cuando usted considera que hace
simplemente unos años ella había estado involucrada en el ocultismo.
Ella había abrazado la misma oscuridad y nihilismo que condujeron
a sus asesinos a tales actos despreciables. Pero hace dos años, Cassie
había dedicado su vida a Cristo, y esto se volvió toda vida. Su amigo,
Craig Moon, la llamó un “la luz para Cristo.”
Bien, esta “la luz para Cristo” vino a ser un extraño mártir del siglo XX.
Según el Boston Globe, en la noche de su muerte, el hermano de Cassie
encontró un poema que ella había escrito simplemente dos días antes de a su
muerte. Leyó:
“Ahora yo he perdido el interés en todo lo demás
Yo he encontrado el único camino
Realmente conocer a Cristo y experimentar
El gran poder que trajo Él a mi vida de nuevo.
No importa si esto significa sufrir y morir con él.
Así, cualquier cosa que tenga que tomar
Yo seré una con el que me da la fresca novedad de vida
de aquéllos que estaban muertos y ahora viven.”
“Todo lo puedo en Cristo que me fortalece”
Fuente: Yeshuanet.com
Link Noticia español: Tu discovery

Ofrenda verdadera


“Jesús dijo: Pero ella, de su pobreza, echó todo lo que tenía, todo su sustento”. Marcos 12:44 (NVI)
Fui parte de un equipo médico que estaba trabajando en Haití cuando ocurrió el terremoto de 2010. Durante ese tiempo aprendí lo que significa la verdadera ofrenda.
Un día, mi hijo y yo jugábamos fútbol con varios niños haitianos. Durante el descanso les repartimos caramelos, uno de los niños se comió la mitad del caramelo y me ofreció la otra. Yo comería más de lo que ese niño iba a comer en varios días, pero él me estaba ofreciendo la mitad de lo que tenía.
Nuestro equipo siguiñó operando en la clínica después del terremoto, pero no sabíamos cuando o como volveríamos a casa. Decidimos conservar nuestra comida y el combustible para los generadores.
Uno de los intérpretes nos dijo que nos traería comida de su casa si la necesitábamos. El y sus cinco hijos vivían en una casa pequeñísima, y teníamos más alimentos en nuestra cocina de lo que su familia comería en dos meses. Sin embargo, él sabía lo que significaba dar de verdad.
Dios nos llama a ser mayordomos generosos de todos nuestros dones. ¿Qué está haciendo sobre esto?
Tomado de El Aposento Alto.

martes, 26 de junio de 2012

Anuncios



Anuncios

En un centro comercial en Coventry, Inglaterra, los investigadores colocaron coloridos anuncios a lo largo de las barandillas de una escalera que decían: "Subir las escaleras protege su corazón". A lo largo de un periodo de seis semanas, el número de personas que eligieron subir las escaleras tradicionales en vez de las escaleras mecánicas que había al lado se elevó a más del doble.


Los investigadores dicen que cada paso cuenta, y que el comportamiento a largo plazo sólo cambiará si los anuncios se ven con regularidad.

Muchos de nosotros no sabemos del peligro, pero cuando nos avisan y nos damos cuenta de las consecuencias, tomamos las medidas necesarias. Pero hay quienes incluso sabiendo del peligro lo ignoran y vociferan “esto no me pasara a mi”.

Todos pecamos, eso es un hecho, entonces todos estamos muertos. Por qué la consecuencia del pecado es la muerte. ¿Por qué Dios nos amenaza con eso? No es una amenaza es una advertencia, un anuncio. Nos esta diciendo que esto es así, es una ley. Causa y efecto. Pecas entonces mueres. ¿Cómo salvarse de esta pena capital?  Simplemente no se puede, alguien tiene que morir. Por eso Dios mismo entrego su vida, se hizo hombre y murió en la Cruz, para otorgarnos el perdón. Para que el que crea en Jesús no muera más tenga vida eterna. 

Muchos hombres han entregado sus su vidas por esta verdad, hombres que fueron testigos de primera mano. Hombres que de saber que todo esto es una mentira, no hubieran dado su vida. Hombres que entendieron que esta verdad es lo más importante de todo.

“Porque la paga del pecado es muerte, más la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús nuestro Señor.”
Romanos 6:23

Esto es un anuncio, que dice “Cree, con todo tu ser, cree”. Puedes ser de los que siguen subiendo por las escaleras eléctricas, o puedes decidir vivir mucho más tiempo.

Es tu decisión, Jesús te está esperando conócele.

Dios les bendiga, estoy a sus órdenes. 
Alejandro Cunillé Fuentes